NAZCA-AREQUIPA - Parte II

Martes, 18/08/2009
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Hay muchas cosas por hacer, así que dividimos las tareas. Nacho y Cristina harán un sondeo entre las agencias de viajes para los dos días siguientes, la excursión al cañon del Colca y el traslado a Puno. Oscar y Alberto, otra vez a modo de porteadores, recogerán el equipaje del terrapuerto, dónde lo habíamos dejado. Isabel y yo haremos algunas consultas a través del servicio gratuito de internet del hotel y esperaremos el regreso de los equipajes para ayudar a distribuirlos por las habitaciones. Al poco rato Carol nos informa que el tráfico en la zona del terrapuerto es problemático así que Oscar y Alberto tardarán un rato en volver. Salimos a la calle y aprovechamos la mañana soleada, paseamos hasta la próxima plaza de Armas, comprobando que en toda la zona son predominantes las construcciones en sillar blanco. Ahora entiendo lo que dicen los lugareños: “Cuando la luna se separó del sol olvidó llevarse a Arequipa”. Por eso le llaman la ciudad blanca, por la forma en que resplandecen los edificios de sillar volcánico blanco bajo la luz del sol. Nos encontramos con Nacho y Cristina en uno de los soportarle de la plaza. Regatean con una señora vestida con traje típico, por la compra de unas muñecas hechas a mano. Con su permiso nos tomamos fotos con ella, su nombre Cristina.

Nos volvemos a separar y quedamos enfrente de la puerta de la catedral a las 12.15 pm. Volvemos al hostal y a los pocos minutos llegan Oscar y Alberto, les ayudo a subir el equipaje. Nos cuentan cómo no han querido contratar los servicios de un mozo en el terrapuerto para llevar las mochilas hasta la salida y tomar un taxi. Cada uno de ellos ha cargado con tres bultos, ¡y son mochilas enormes!.

Nos reunimos todos en la puerta de la catedral y Nacho nos pone en antecedentes de las ofertas que ha conseguido para la excursión y el traslado a Puno. La agencia elegida se llama ACUARIUS y se encuentra en la calle Santa Catalina, 104 (http://www.acuariustravel.com/) a la vuelta de la esquina. Nacho y yo nos quedamos gestionando la contratación de los servicios de la agencia, dando los números de los pasaportes y efectuando el pago. El resto se van al supermercado a comprar cervezas y snacks y a fotocopiar los pasaportes, algo que nos han solicitado en nuestro alojamiento. Nos reuniremos en el hostal en cuanto terminemos.

Los precios por persona son los siguientes: para la excursión al cañon del Colca (incluye traslados, alojamiento, desayuno y guía durante los dos días) 70 S/. (aprox. 16,65 €) y por el traslado Chivay-Puno 90 S/. (aprox. 21,45 €).

Regresamos al hotel dónde nos reunimos todos de nuevo. El reloj casi marca las 13.00. Tenemos que comer o no llegaremos a la salida del city tour que se inicia a las 14.00. De camino a la plaza de Armas y muy próxima a ella, en la calle Morán, entramos en el restaurante “Casa Granada”. Hay dos plantas, nos gusta la de arriba, constituida por un entablado de madera desde la que tenemos visión de la entrada al local y de la calle. Sirven menús por 7,50 S/. (1,80 €) pero a todos nos apetece probar otras cosas así que pedimos a la carta, carne en diferentes versiones; varias raciones de anticuchos, filetes de res, lomo saltado, bistec a lo pobre, lomo fille mignon, y claro todo regado por Cuzqueñas abundantes. Le decimos a la camarera que tenemos prisa, nos dice que no hay problema que hay tiempo de sobra. Típica costumbre peruana, sus cinco minutos son casi media hora europea. Al final tenemos que engullir como pavos en poco más de quince minutos, pagamos a toda prisa (160 S/. – 38,10 € por la comida de los seis) y salimos a la carrera hacia el punto dónde nos espera el bus, en los soportarles de la plaza. Nos colocamos en la planta superior, somos los últimos en llegar, al montar nosotros el bus arranca.